El Museo Británico de Londres, además de ser uno de los museos más antiguos del mundo, es una de las colecciones de antigüedades más grandes y famosas que existen.
El museo se creó en el año 1753 y abrió sus puertas al público el 15 de enero del 1759. Los orÃgenes del Museo Británico van unidos al coleccionista Hans Sloane, que deseaba que su colección de más de 80.000 artÃculos perdurase para siempre tras su muerte.
Entre los objetos de la colección estaban más de 40.000 libros y antigüedades procedentes de Grecia, Roma, Egipto, Oriente Medio y América.
La primera ubicación del Museo Británico fue una mansión del siglo XVI, la Casa Montagu, que comenzó a quedarse pequeña debido al rápido crecimiento de las colecciones, tanto por las compras realizadas por el museo.
En 1782 aumentó considerablemente la colección de piezas de origen griego y romano y, después de esto, en 1801 el museo adquirió una gran cantidad de antigüedades egipcias, entre las que se incluye la impresionante Piedra Rosetta,de la cual hablo en otro rincón.
En 1887, debido a la falta de espacio que estaba teniendo el museo, la colección de objetos naturales se trasladó al Museo de Historia Natural, y en el año 1973 la Biblioteca Británica se independizó del museo.
Si vais por Londres no podeis perderos este precioso museo,es una maravilla,y esconde muchos tesoros,además de ser gratuito para todo el público.
Si eres amante de la historia o de la arquelogÃa, en el British Museum puedes pasarte dÃas. Si eres, como yo, un simple turista, vas a pasar un largo rato viendo las fascinantes colecciones de todas las épocas de la humanidad.
Allà están las obras de arte y objetos antiguos más famosos, como la Piedra Roseta, la momia de Cleopatra, esculturas de la antigua grecia y miles de cosas más.
En el interior del inmenso edificio, destaca la grandiosa bóveda circular de cristal diseñada por Foster.
Ah, y la entrada es gratuita!