Este hotel se encuentra cerca de la ciudad vieja de Praga y del puente de Carlos.
Me quedé muy contenta con mi habitación con su vigas y suelos modernos.
El servicio del hotel era excelente, y un desayuno satisfactorio se ofrece todas las mañanas incluido en el precio de la habitación.
Me gustó estar cerca del centro de toda la actividad sin estar completamente en el medio de todo.
No hay Internet sin cables, pero hay un ordenador en el vestÃbulo, que es de uso gratuito.
También me pareció que el hotel era muy fácil de encontrar por mi cuenta ya que llegué al aeropuerto de Praga y utilizamos el autobús y metro para llegar a la ciudad.
El hotel está a sólo cinco minutos a pie de la parada trida de Narodni en la lÃnea B.